LOS PLATILLISTAS ET EN SU LABERINTO
Gustavo Flores Quelopana
Sociedad Peruana de Filosofía
Sobre
el fenómeno OVNI he expresado mi opinión y conclusiones en la investigación emprendida
en mi reciente libro: Ovni: mitoide
encubridor de la carrera armamentista (Lima 2015), por lo que no insistiré
sobre lo afirmado en dicho texto, y sí, más bien, compendiaré sistematizando
mis opiniones vertidas en el Foro Virtual de mi amigo Kiko Alvarez Vita. Mis observaciones
que vienen a continuación son de carácter metodológico, gnoseológico y epistémico,
que no han recibido aun una respuesta argumentada y sólida. Mi ánimo no es encender
una vana polémica sino echar y recibir luces sobre los puntos abordados.
ET y las preguntas teológicas
cruciales
Resulta
verdaderamente sorprendente con cuánta frivolidad ciertas iglesias y teólogos
hablan de bautizar alienígenas si el caso se presentase, puesto que el
verdadero debate teológico se centra en dos puntos:
1.
explicar cómo se concilia con
el Génesis y la Sagrada Escritura el hecho de hallar vida inteligente no humana
de origen alienígena.
El problema aquí no se trataría de defender la unidad de los libros sagrados, sino interrogar por varias cosas fundamentales, entre ellas:
¿Seguiría
siendo el hombre la criatura superior en la jerarquía de los seres?
¿La
criatura inteligente no humana desciende de Adán?
¿Si
la Redención es única e irrepetible entonces es válida sólo para el género
humano o todos los seres inteligentes del universo?
¿La
creación de seres a imagen y semejanza de Dios no se refiere a la forma humana
sino a la capacidad de juicio racional y moral?
¿Los
seres inteligentes alienígenas ya recibieron el evangelio o serán adoctrinados
en la tierra?
Estos
y otras preguntas cruciales son las que se tendrían que absolver dentro del
terreno teológico en caso de hallarse vida alienígena inteligente; puesto que
la pregunta filosófica más bien interrogaría si el hombre sigue siendo el
centro metafísico-moral del cosmos.
Son los demonios de siempre
A
propósito del 2do Encuentro de Unidad Mundial denominado "Hacia el
despertar de la conciencia", donde se hacen presentes muchos
"contactados" platillistas, que se efectuó en Lima en el colegio
católico Santa María Eufrasia, surge la siguiente reflexión.
El contactismo platillista sostiene que por facultades psíquicas especiales o privilegiadas (meditación) o revelación espontánea, ciertos individuos son contactados por supuestos seres extraterrestres inteligentes, los cuales proporcionan mensajes de interés para la humanidad.
Ahora bien, si excluimos intencionalmente del fenómeno platillista "contactista" cuatro casos, como son:
El contactismo platillista sostiene que por facultades psíquicas especiales o privilegiadas (meditación) o revelación espontánea, ciertos individuos son contactados por supuestos seres extraterrestres inteligentes, los cuales proporcionan mensajes de interés para la humanidad.
Ahora bien, si excluimos intencionalmente del fenómeno platillista "contactista" cuatro casos, como son:
-los
operativos psicosociales de encubrimiento de tecnología militar,
-los
cuadros relacionados con síndromes de patología psicológica (oír voces como en
los episodios psicóticos espontáneos, ver alucinaciones como en la
esquizofrenia),
-las
alteraciones sensoriales (espejismos, ilusiones) y
-los
abundantísimos fraudes (con moderna tecnología cibernética),
Entonces
el "contactismo ET" se ve reducido a dos posibilidades:
(a) Se
trata de ET reales, o (b) se trata de las huestes demoníacas.
Veamos la primera alternativa. Si los ET son seres reales, entonces no se entiende por qué visitan supuestamente a la humanidad desde hace miles de años limitándose a mariposear por el cielo y contactar con ignaros, en vez de dar efectivamente una contribución efectiva a los problemas urgentes de la humanidad (como la cura del cáncer, del hambre mundial, la escasez del agua, una nueva fuerte de energía no contaminante, etc.). Hay quienes piensan que los supuestos ET son tan adelantados su propósito es no intervenir en nuestra historia. Este argumento es tan inverosímil dado que su avance intelectual tendría que estar acompañado de un notable avance moral, y por su abundante compasión no se abstendrían de ofrecer ayuda a la humanidad. Dada la incoherencia interna de la alternativa que los ET son reales, procedemos a descartarla como explicación plausible del contactismo ET.
Veamos la segunda alternativa. Si los ET no son seres reales, sino parte del numeroso contingente demoníaco, entonces sí se comprende su interés por contactar con seres humanos para comunicar un nuevo evangelio (como efectivamente lo ilustra muy bien el caso del supuesto estigmatizado Bongiovanni) y no ofrecer ayuda efectiva alguna. Lo que llama especialmente la atención es que los supuestos ET se presentan a los contactados como seres de luz (también se dice que hay seres de la oscuridad) y sus mensajes insisten en revertir el mensaje del evangelio. Este obsesivo punto es el que llama poderosamente la atención y advierte que los ET de antes son los Demonios de ahora y de siempre. El jesuita padre exorcista Corrado Balducci se equivocó profundamente diciendo que los Ángeles de antes son los ET de hoy, pero la verdad es los ET de ahora son los demonios de siempre.
Piensan en quimeras
A
propósito del cuarto día del 2do Encuentro Mundial platillista, que se realizó en
Lima, viene otra reflexión: Los platillistas que defienden la existencia de los
ET están atrapados en una quimera. Según
Descartes es perfectamente posible imaginarse una quimera. Esto es, lo
lógicamente coherente no tiene que ser necesariamente existente. Y es frecuente
leer que los argumentos platillistas empiezan así: “…es lógico pensar…” Y según
Newton todo cuanto no es observable y mensurable no existe para la ciencia ni
para la física, porque no es posible la rectificación mediante la observación.
En otras palabras, si el ente ha de poder ser pensado como existente, debe ser
realmente existente. Pero no es el pensamiento sino la intuición lo que puede
evitar las artimañas de la lógica y decidir si un ente es algo realmente
existente. Este razonamiento no puede ser aplicado a Dios, pero sí a los ET
porque sencillamente serían seres finitos.
Pues bien, ni los platillistas que afirman que los ovnis son naves de los ET, ni los contactados que dicen que los ET les hablan o comunican mensajes, han podido brindar una prueba irrefutable que los ET sean seres realmente existentes. Y lo peor de todo es que no sólo son víctimas de la lógica sino que en sus eventos insisten en la misma metodología pseudocientífica, sin mostrar ningún avance teórico y práctico serio. De este modo, el concepto de ET no es ni analógico ni unívoco, sino que es un concepto equívoco, porque pretende atribuir existencia real a algo que no lo tiene. De manera que sus jeremíadas no los exime de la responsabilidad de presentar pruebas y, al contrario, enconchabarse en el silencio los señala como una creencia dañosa para el aparato lógico y que pervierte el sentido de la realidad.
ET carecen de normatividad
cognoscitiva
La
norma para la teoría de los conocimientos ufológicos debe mostrar su eficacia
en esta ciencia y en su concepción del mundo. Así pues, la norma para dichos
conocimientos no es la ratio lógica
(insuficiente porque ha de tomarse en cuenta la observación), ni la ratio empírica (porque los sentidos
engañan), ni la ratio metaphysica
(porque se trata de una sustancia material), ni la ratio teológica (porque no se identifica con el Logos divino) sino
con la ratio physica (porque es
observable y está sujeto a experimentación).
Lo singular del caso es que la ratio physica confirma solamente el fenómeno ovni como fenómeno natural (nubes lenticulares, rayos esféricos, hologramas solares, etc.) y como fenómeno humano (fenómenos psicológicos o tecnología secreta furtiva). Todo lo demás (hermanos mayores, seres extraterrestres, razas alienígenas, portales interdimensionales, flota de confederación intergaláctica, experimento genético interestelar, etc.) pertenece a la dimensión de las hipótesis quiméricas que Descartes ni Newton no aceptaban ser confundidas como real, o sea son parte de la literatura de ficción y de las alucinaciones colectivas de mentes sugestionables o patologías psíquicas de platillistas descontrolados.
Quizá
la más importante implicancia de la primacía de la ratio physica en ufología sea el desprecio por los esquemas
artificiales, que con ayuda de la mera lógica pueden obtener conclusiones
formalmente exactas, pero que pueden llegar asimismo a resultados que no
existen materialmente en la naturaleza.
El
primado de la ratio physica en la
Ufología significa también que no tiene sentido una máxima geometrización de la
naturaleza, ni tampoco partir únicamente de la observación y menos del
testimonio subjetivo. Pues los valores a obtener deben poder ser comprobados y
rectificados en la tercera etapa del conocimiento físico (1° observación, 2°
extraer de los resultados de las observaciones un principio, y 3° basar la
matemáticas en la praxis física y no la física en las matemáticas). Esto ayuda
a no perder que la creencia en ET son parte de las ideas mitológicas
neoplatónicas que identifican a la naturaleza con el Logos divino y que se
descubre a aquel que le escucha.
La búsqueda de tecnología ovni
Existe
una invencible tendencia a subestimar los logros del hombre cuando se habla de
ovnis y ET, pero hay que recordar que esta tecnología no es nueva, y con ello
no me refiero solamente a la década del 30 con los nazis, sino a las
investigaciones de sustentación antigravitatoria que se hicieron desde
comienzos del siglo XX a partir de las teorías de Tesla. Es por eso que la
información de la CIA no es completamente cierta, porque los EEUU no sólo
experimentaron con alas voladoras y platillos volantes desde los 50 sino desde
fines de la II Guerra Mundial.
Además,
se conoce que Perón en complicidad con Stroessner permitió el ingreso de una
gran cantidad de científicos nazis con el fin de tener su propia arma nuclear y
al final fue engañado vergonzosamente. Rusia tampoco renunció a la conquista de
las nuevas armas. Todo lo cual lleva a pensar que muchas otras cosas pudieron
traer los nazis consigo a América Latina, quizá la famosa "campana
ovni" de la que tanto se habla y que justamente de esa forma fue vista en La
Joya. Es razonable la alarma de la FAP en La Joya, pues la inteligencia rusa no
desconocía que a Chile fue a radicar en un lugar de acceso restringido cierta
cúpula nazi con oscuros propósitos. En pocas palabras, la búsqueda tecnológica
de anulación de inercia y mecanismo antigravedad no son nuevas y ya llevan
décadas de trabajo en programas negros (furtivos y secretos).
Platillistas proceden
pseudocientíficamente
En
lo que concierne al fenómeno ovni y los ET hay que afirmar con Newton y Kant
que a nadie le es lícito prescindir de las ciencias naturales en dichos
fenómenos, porque precisamente en su experimentación, repetida bajo unas mismas
circunstancias, se encuentra la rectificación del aparato conceptual ufológico.
La
desmitificación y desideologización del aparato conceptual ufológico exige, en
este sentido, tomar distancia tajantemente de la extraviada opción
"contactista" -que convierte la ufología en metafísica del
mediumnismo incontrastable e inverificable-, como de la opción
"pseudo-científica", que aboga por una manipulación ininteligible de
la jerga matemática, física y cosmológica, con el fin ideológico de justificar
las novelescas ideas de los "hermanos mayores, seres extraterrestres
guardianes, portales interdimensionales, etc.". Ambas opciones
platillistas son las que actualmente enturbian el estudio serio del fenómeno y
una epistémica del fenómeno UFO las puede sepultar definitivamente.
Contactistas
ET son víctimas de una silogística renovada
El
peligro de justificar la opción "contactista" en otro tipo de lógica
es que nos pone ante el riesgo de caer en el precipicio donde se prescinde de
los fenómenos materiales por una logicidad de la física. Si antes Kepler y
Descartes -atendiendo al sistema cerrado de la geometría euclidiana-
incurrieron en una errónea matematización de la física que prescinde de los
fenómenos reales.
Ahora
la opción "contactista" aspira a una nueva lógica no occidental para
justificarse, sin advertir que con ello la física como ciencia meramente
experimental quedaría reducida a una colección de experimentos lógicos que
ciertamente se apoyarían entre sí, pero que no darían certeza sobre el problema
que pretenden defender, a saber, la existencia de seres extraterrestres. Serían
víctimas de una nueva silogística de
la susodicha nueva lógica.
Si
el contactismo es un método de meditación tan eficaz y real, entonces no se
comprende por qué no se les pide la cura para el cáncer, el sida, el ébola, la
eliminación de la pobreza, la obtención de la energía a fusión, y otras cosas
que harían tanto bien a la humanidad, en vez de charlar sobre cosas
insubstanciales y mensajes esotéricos sin importancia. Todo esto ya es conocido
y hace pensar que la respuesta es fallida, de ahí que sea comprensible que se
trata de meros trances colectivos de mentes sugestionables, sin ningún valor de
su veracidad científica.
"El
tema OVNI tiene aspectos que trascienden a los objetos convencionales" y
se deduce que lo no convencional es lo que se obtiene por "contacto".
Con esta respuesta viciosa y circular volvemos al comienzo, y parece más bien
que el susodicho "contactismo" no puede defender con coherencia sus
aspectos mistificadores ni evitar el precipicio lógico. Naturalmente, todo lo
que aquí escribo no es para hacer cambiar la opinión de los contactistas y sus
acólitos, ellos son invulnerables a todo razonamiento lógico y prueba empírica,
sino que como Jung lo que lo escribo está dirigido a mentes imparciales que no
han desvariado el juicio.
Los ET son mera ideología
La
utilización de la doctrina newtoniana hypothesis
non fingo lleva directamente a la negación de la opción
"contactista" y de los míticos seres extraterrestres, e incluso la
perspectiva operacionalista de la teoría de la relatividad generalizada lleva a
Einstein a reducir la física a conceptos sobre objetos físicos, dentro de los
cuales los seres extraterrestres, por no ser contrastables ni verificables,
sino mera ideología mítica supletoria de la religión, no tienen cabida alguna.
El
problema crucial que se le plantea al contactismo es saber si lo percibido en
la meditación es solo una esperanza adecuada y justa del pensamiento subjetivo,
o si se le considera más bien acorde la dimensión ontológica del ser, es decir,
dentro de una perspectiva física y metafísica.
Sofismas de los defensores de
los ET
Hay
afirmaciones de los defensores de los ET que merecen un análisis, como son:
1."Los
seres extraterrestres no son salvadores ni una amenaza, primero hay que
contactarlos".
2."Ciertos teólogos admiten la posibilidad de vida extraterrestre porque el dogma lo permite".
2."Ciertos teólogos admiten la posibilidad de vida extraterrestre porque el dogma lo permite".
Sobre (1) se incurre en una petición de principio, o sea, no se puede admitir la existencia real de aquello que aun no se ha demostrado que existe realmente. Por tanto, no tiene sentido hablar de seres extraterrestres inteligentes en el sentido actual. Pues potencialmente se puede hablar hasta de dragones.
Sobre (2) hay que precisar que el dogma permite la discusión sobre el tema pero no necesariamente lo admite. Al contrario, guarda una prudente distancia doctrinaria.
Carecen de evidencias reales
A
todas luces el platillismo contactista es incapaz de responder y no puede afrontar
una solución que en último término es ontológica, porque dada su limitación a
las determinaciones conceptuales categoriales del mundo de los sentidos, recibe
las modificaciones de sus presupuestos conceptuales exclusivamente desde sus
fundamentos imaginarios y ficticios. Por eso se tiene razón al afirmar que en
el mundo contactista no puede darse en parte alguna una evidencia real.
Así
como la geometría dejó de ser euclidiana desde que se demostró la existencia de
masas gravitacionales, de modo similar el contactismo platillista no dejará de
ser alucinación de mentes fanatizadas
hasta que se demuestre fehacientemente la existencia de seres extraterrestres
inteligentes. Bajo este condicionamiento se puede afirmar que dichos seres no
existen. Y como en nuestro universo experimental estos condicionamientos se dan
siempre de facto, entonces el mundo de los seres inteligentes se limita a los
seres humanos del planeta Tierra.
Mirada ficticia del cosmos
Mientras
la teoría de la relatividad se distingue en la física por la sencillez y
elementaridad de sus presupuestos fundamentales, que permiten sospechar la
posibilidad de una mirada intuitiva a la estructura armónica del universo, en
cambio la opción platillista contactista se distingue por su enrevesamiento e
incoherencia de sus postulados básicos, que permiten tener la convicción de una
mirada confusa y ficticia del cosmos.
Según
el contactismo platillista su teoría es consistente porque encuentra su
justificación en el hecho de que su intuición es practicable. Dicho
descriptivamente, su meditación es efectiva porque logra el contacto con los seres
extraterrestres que se hacen presentes (¿¡).
Sin embargo, es preciso precaverse, según Einstein, del peligro de considerar la construcción mental como expresión idealmente abstraída de algo ónticamente real. De lo contrario surgiría de nuevo un positivismo del tipo del de Mach, para quien los conceptos fundamentales de la ciencia, especialmente la física, son copia o reflejo de experiencias reales.
Por
el contrario, para Einstein los planteamientos de la física moderna no son
abstracciones de experiencia, sino invenciones artificiales o invención libre
del espíritu humano. Así, en contra del empirismo primitivo del contactismo
extraterrestre hay que reconocer que la ciencia no se apoya en ningún elemento
material activo observable (estructuras de campo maxwelianas, velocidad de la
luz, equivalencia de masa y energía, materia oscura, energía oscura, etc.) sino
en conceptos que cumplen el principio de contradicción y tienden a algo real.
Es decir, en la ciencia persiste la oscura zanja entre naturaleza y esquema
conceptual.
En
cambio, el contactismo extraterrestre recurriendo al impulso de la intuición y
sin acomodarse a los hechos observados ni fundarse en la experimentación habla
como cosa cierta de seres extraterrestres, razas alienígenas, flota intergaláctica,
mensajes redundantes y triviales, y toda clase de estrambóticas ideas que se
divorcian de los hechos observados.
En
una palabra, la justificación de la teoría contactista se deriva únicamente de
una arbitrariedad metodológica que
no puede demostrar que su intuición puede ser practicable. Pues, así como no es
posible derivar lógicamente del mundo experimental lo conceptos físicos
fundamentales, tampoco el contactismo puede derivar la existencia de seres
extraterrestres de subjetivistas meditaciones incontrastables.
Intuición fantasiosa de
platillistas
La
intuición de los platillistas no es la intuición de Einstein, porque mientras
para el gran físico se trata de un "instinto científico" que siente
pasión por las conexiones profundas de la naturaleza y arrastra al pensamiento
ordenador a una actividad creadora al establecer una imagen única que se
manifiesta en el mundo de lo experimentable, en cambio en los platillistas se
trata de una intuición asociada a un primitivo empirismo que se limita a una
coherencia lógica interna sin preocuparse de la comprobación de la teoría
intuitiva. Por eso, en el caso de los platillistas meditativos se trata, en vez
de una praxis, de una fe sin vínculo objetivo con hechos y sí con ilusiones y
deseos religiosos.
Si de los supuestos seres extraterrestres inteligentes no
se cuenta con ninguna evidencia demostrada, entonces su existencia no compete a
la ratio physica, que se preocupa de
las experiencias de los sentidos y de la comprensión de sus conexiones mutuas,
sino de la ratio psicológica, que se
ocupa de las experiencias de la mente y del ánimo.
Ya
el mismo concepto de "seres extraterrestres inteligentes" se apoya
exclusivamente en la imaginación y no en impresiones sensitivas reales como las
que corresponde al mundo exterior real. Debemos insistir aquí, ante todo, en
que la distinción entre impresiones sensitivas e imágenes no es posible con
absoluta certeza y que una explicación mediante conceptos significa la
elaboración de una especie de orden entre las diversas impresiones de los
sentidos, a través de la creación de conceptos generales, hasta que se consiga
un sistema de mayor unidad conceptual.
No
obstante, ello no es obstáculo para diferenciar entre un la imagen de un objeto
irreal creado por la imaginación y la imagen de un objeto real o un objeto
ideal que existe independientemente de la conciencia. Y hasta el momento no
existe evidencia alguna que desmienta que los seres extraterrestres
inteligentes son mera imagen de objetos
creados por la imaginación humana. Así las cosas, debemos dejar paso para
que el platillismo extraterrestre tenga acceso libre al diván del psicólogo.
El primer presupuesto para que un científico pueda llegar
a conocer la fórmula del universo es que la naturaleza le enseñe algo.
Descartes mismo acentúa expresamente la actividad docente de la naturaleza.
Einstein, de acuerdo con esta idea, habla de las manifestaciones de este mundo
o de que en la naturaleza se manifiestan cosas experimentables por el hombre.
En
cambio preguntémonos, ¿algo tienen que mostrar el platillismo contactista? Al
parecer, sus "hermanos mayores" son tan mezquinos que se limitan a
"saluditos" insubstanciales de luces que mariposean en el cielo. ¿O
acaso en tecnología les han dado algo (reacción a fusión, anulador de inercia,
mecanismo antigravedad, mapa del universo, generador de agujeros de gusanos,
etc.)? la respuesta es NADA. ¿o acaso en medicina han tenido piedad (cura del
cáncer, sida, ébola, etc.)? Otra vez NADA. ¿O acaso en cuestiones sociales
(eliminación del hambre, guerras, tiranos, etc.)? Nuevamente: NADA. Es ridículo
pensar que unos seres tan avanzados sean tan egoístas.
Obviamente
es ocioso reiterar la pregunta en otros terrenos, salvo el psicológico; pero
esta vez el aporte viene de los propios contactados, cuya práctica morbosa ya
fue bien explicada por Carl Gustav Jung.
Fallida pretensión de
racionalidad
No
todo ufólogo cree en "seres extraterrestres inteligentes", pero una
importante manada va detrás de una fe que es invulnerable a la razón, a la
intuición y a todo tipo de argumentación que refuta la creencia en dichos
seres.
Este
convencimiento dogmático sacrifica la libertad del pensamiento por
irrealidades, hasta ahora, totalmente indemostrables. Cuando algún tipo de
ratio los cuestiona se quejan y aducen que hay que atender a la concreta
totalidad del mundo fenoménico que no sólo es físico, también abarca la vida,
lo orgánico, la historia y lo divino. Y descaradamente insisten en que hay
pruebas de su creencia pero extrañamente nunca lo muestran.
Es
decir, estamos ante una fallida
pretensión de racionalidad que juega con la mistificación de sus respuestas.
¿Cómo hacer frente a semejante estrategia? Imposible, su convencimiento
dogmático supera lo racional y se constituye en la "Iglesia de los
Ufólogos". Su esterilidad
gnoseológica la ocultan acusando de escepticismo o de primitivismo
espiritual, a cuanta objeción tengan enfrente. ¿O acaso pueden mostrar la foto
no trucada de algún alienígena que demuestre su creencia? No pueden. Pero
debieran ser más sinceros, pues si los ufólogos han elegido el camino ideal de
convertirse en iglesia deberían decirlo y abandonar el travestismo científico.
Platillistas ET atrapados en su
laberinto
Hay
platillistas que preconizan el desarrollo de un nuevo aparato lógico-metafísico
para entender el problema ovni en términos de seres extraterrestres
inteligentes. Pero lo que no demuestran es la necesidad interna de esta tarea,
es decir qué hay de congelado en nuestras afirmaciones estereotípicas que
impiden una mejor comprensión del fenómeno, tanto en la lógica clásica como en
las lógicas no clásicas.
Ya
la evolución continua de la ciencia ha puesto en entredicho la afirmación del
valor lógico absoluto de un juicio, que Kant todavía admite, siguiendo con esto
la tradición casi unánime de la filosofía occidental. La excepción son Platón y
Bergson. El primero pone énfasis en la dialéctica y en el mito, y el segundo en
la intuición creadora para romper los conceptos congelados. La verdad es que
ningún tipo de lenguaje lleva hacia un concepto físico inequívoco sino tan sólo
aproximado entre realidad y conocimiento, por tanto la acomodación conceptual
será siempre una tarea necesaria, pero ningún reacomodo mental tiene la legitimidad
de hacer pasar una posibilidad lógica como posibilidad real. Por eso es bueno
recordar a los platillistas novológicos que prosigan en su empeño pero con
rigor y claridad.
Lima, Salamanca 08 de
abril 2015