PANDEMIA Y MODERNIDAD
Gustavo
Flores Quelopana
Ex-Presidente
de la Sociedad Peruana de Filosofía
PRÓLOGO
(Libro colectivo)
La pandemia del coronavirus ha evidenciado que la crisis global no
solo es económica y ecológica sino también sanitaria. El aislamiento social que
se ha impuesto por su letalidad reveló que la educación, el trabajo, la
miseria, y la salud no pueden seguir siendo una prerrogativa privada, sino una
responsabilidad social de los Estados. O sea el Estado-Poder del
hiperimperialismo mundial ha mostrado sus falencias profundas y el
Estado-Justicia muestra su urgencia.
El origen desconocido del virus ha llevado a pensar en muchas
posibilidades, desde las conspirativas hasta las naturales, pero lo que ha
puesto en el tapete de modo indudable es que el estilo de vida urbana y el
incontenible aumento de la población humana, no tiene salida por insostenible.
Es decir, que el problema no sólo es el capitalismo sino la modernidad
misma. La cual ha llevado a un callejón sin salida que delinea una crisis de
proporciones civilizatorias. Y es aquí que el problema de político, tecnológico
y económico se torna filosófico.
El enfoque pequeñoburgués lleva a denunciar al capitalismo global
y proponer reformas tributarias y
antimonopólicas sin cambiar el sistema mismo. Pero esa ingenuidad romántica de
volver a tiempos felices no solo es antihistórica y antirrevolucionaria, sino
que además pierde de vista que el problema de fondo es la racionalidad moderna.
Lo que revela la pandemia es la crisis de la conciencia moderna.
El antropocenio tornado en antropocidio parte del error básico de hacer a la
razón humana el fundamento de sí misma. Así se instauró el regnum hominis y un
mesianismo laico del humanismo sin Dios que extravió lo trascendente y mutiló
la esencia humana de su afán de inmortalidad.
La modernidad es el asalto a la razón que destruyó los valores
espirituales, desembocando en el reino de la materia. La consecuencia ha sido
dejar sin posibilidad de construir una nueva civilización. La pandemia del
coronavirus acontece en medio de la curva decadente de la civilización
tecnológica moderna. De manera que estamos en medio del sorbo de la última gota
letal de una civilización que debe sucumbir sin remedio.
El desafío ha dejado de ser la restauración del fundamento
trascendente del orden humano y natural para pasar a formar cenáculos que
preserven la cultura en medio de la barbarie que se adviene.
Por tanto, no nos ha tocado gozar del aire perfumado de la
achicoria y manzanilla, sino del maloliente y pútrido olor fangoso de un cuerpo
que se deteriora trepidante en el horno de la historia.
El presente libro debe su aparición a la iniciativa, perseverancia
y coordinación del profesor José E. Chocce. Por su intermedio se extiende un
agradecimiento a todos los humanistas y pensadores que participan con sus
reflexiones en la obra que tiene en sus manos el amable lector.
Lima, 19 de Mayo del 2020